El otoño ya casi está aquí, y con él también llegan las chaquetas, los abrigos y los suéteres, bufandas y mantas. Hacer el cambio de armario de verano a otoño no siempre es fácil. Es la misma cantidad de ropa pero mucho más voluminosa. Entonces, ¿cómo podemos organizar mejor los armarios para dejar el espacio adecuado para nuestra ropa de invierno? Aquí tienes algunos trucos para un cambio de armario perfecto.
El equipo
Antes de empezar a vaciar el armario y los cajones, hazte con todo lo necesario para guardar tu ropa verano, como cajas, bolsas de vacío, antipolillas (los estrictamente necesario), etiquetas para marcar las cajas y productos de limpieza para el armario.
Vaciar el armario
Cuando hayas reunido todo lo necesario, será hora de sacar la ropa de verano, lavarla, y ponerla en las cajas, posiblemente divididas en ropa de cama, vestidos, trajes de baño y ropa de playa. Recuerda, el secreto para un cambio de armario perfecto es el orden. A continuación, utiliza las etiquetas para ponerlas en las cajas con el fin de encontrar fácilmente lo que estás buscando. Vaciar el armario es siempre una buena oportunidad de hacer una revisión completa con el fin de deshacerte de las sábanas o la ropa que ya no usas. Una vez que el armario esté vacío, coge los productos, límpialo minuciosamente y pon los antipolillas en las perchas y los cajones.
Bienvenida, ropa de otoño
Es muy importante prestar atención a cómo se almacena la ropa de otoño en el armario. Ocupa mucho más espacio que la de verano, por lo que debes elegir cuidadosamente cómo y cuál doblar y cuál colgar, cuál poner en los cajones y cuál no. De esta manera, siempre podrás guardar todo en perfecto orden y no ocupar espacio innecesariamente. Cuelga los vestidos, faldas, chaquetas y abrigos y prioriza los cajones para suéteres y pantalones. No olvides prestar atención a los accesorios también. Hay accesorios que son puramente veraniegos. No los dejes en el armario solo por pereza, ponlos en las cajas junto con otra ropa para hacer espacio para guantes, sombreros y bufandas de invierno.
El cambio de armario siempre toma algún tiempo. Tú eliges si prefieres hacerlo en un solo día o en varios pasos. ¿Un último consejo? Para hacerlo menos aburrido, ponte tu lista de reproducción favorita y verás que entre una canción y otra, ¡terminarás el trabajo en poco tiempo!