Beneficios
El smart-working tiene múltiples beneficios. En primer lugar, supone una gran ventaja económica para las empresas, ya que pueden recortar en costes de alquileres, facturas y seguros. Pero más importante aún: también representa una ventaja económica para ti. Te ahorra dinero en espacios de trabajo, transporte o suministros (electricidad, calefacción, etc.). También te evita mucho tiempo de desplazamiento, especialmente si vives en una gran ciudad, pero, sobre todo, aumenta la libertad y la autonomía del trabajador.
Productividad
El smart-working favorece la concentración, ya que elimina las distracciones presentes en el lugar de trabajo, como el ruido de los teléfonos de tus compañeros sonando continuamente. Ayuda a estar más cerca de los clientes, especialmente en caso de reuniones. En general, los trabajadores se benefician tanto en términos de tiempo ahorrado como en reducción del estrés, lo que promueve una mayor productividad. Todo lo que necesitas es organización, casa y trabajo. ¡Si puedes encontrar el equilibrio correcto, tu casa será aún mejor que tu oficina!
Herramientas y espacio
No hace falta decir que una buena conexión a internet es esencial para practicar el smart-working. Las herramientas básicas que necesitarás son: un ordenador, preferiblemente portátil, un teléfono, una agenda y un bloc de notas. Para terminar, el lugar donde llevas a cabo el smart-working también es importante. Si no cuentas con un estudio, busca una habitación lo más aislada posible para evitar que los demás habitantes de la casa te molesten, ¡especialmente tus hijos! Recuerda elegir una silla cómoda y presta atención a tu postura.
Tiempo para ti
Por último, pero no menos importante, gracias al smart-working tendrás más tiempo para ti y para tu casa. Dispondrás de más tiempo para dedicarle a tu pareja, si también trabaja desde casa, y también a tus hijos. Tendrás más tiempo para mantener tu hogar más limpio y ordenado, haciendo que tu vida sea más cómoda. Evitarás pasar los descansos para el café escuchando a tus compañeros quejarse del jefe y de sus problemas. Será una manera de redescubrirte y de reducir la velocidad de tu ajetreada vida laboral. Para terminar, y entre los aspectos más importantes, podrás decir adiós a las fiambreras o a los bocadillos preparados a toda prisa. Al trabajar desde casa, tendrás todo el tiempo que necesites para cocinar lo que quieras.