Se acerca el invierno, el clima es cada vez más frío... ¡y el riesgo de enfermar y resfriarse es cada vez mayor! En esta época del año, a todos nos gustaría conocer algunas formas naturales de aliviar los síntomas del resfriado, garantizar una recuperación más rápida y hacer que los estornudos y la nariz tapada sean más fáciles de soportar sin tener que tomar medicamentos.
Aquí te proponemos algunas recomendaciones de nuestro blog: saludables, naturales y fáciles de preparar en casa, ¡para que este otoño-invierno ningún resfriado sea un problema!
- Té de jengibre: famoso por sus propiedades antiinflamatorias y descongestionantes, el jengibre es una ayuda maravillosa cuando tienes un resfriado. Todo lo que necesitas para preparar tu té es 1 litro de agua para hervir, jengibre fresco rallado (6 cucharaditas), miel (1 cucharada) y el jugo de medio limón. ¡Delicioso y buenísimo para tu cuerpo!
- Vahos de eucalipto: los vahos de vapor se encuentran entre los remedios tradicionales más conocidos y utilizados. Lleva a ebullición un cazo pequeño de agua, vierte 5-10 gotas de aceite esencial de eucalipto (un potente descongestionante, útil para tratar resfriados o sinusitis), cúbrete la cabeza con una toalla y respira los vapores.
- Ajo y limón: después del jengibre y el eucalipto, llegamos a otro descongestionante natural que aliviará la mucosa inflamada y destapará las fosas nasales: el ajo. Pica un diente de ajo, mézclalo con el jugo de medio limón y vierte la mezcla en un vaso de agua caliente. Luego añádele una cucharadita de miel.
- Sirope de cebolla: un excelente remedio natural cuando un resfriado también incluye tos. Pon unas rodajas de cebolla morada en un bote cristal, vierte miel y deja reposar unas horas. El sirope resultante combinará las propiedades antibacterianas y antiinflamatorias de la cebolla con la capacidad natural de la miel para calmar la tos.
Acaba con tu resfriado... ¡de forma 100 % natural!