Vino y tapas: el mejor maridaje para cada vino. Descubra las sorprendentes combinaciones de vino y tapas y aprenda a elegir las tapas según el tipo de vino
Tapas y vino, ¡una combinación perfecta! ¿Cuál es la mejor manera de combinarlos? En este artículo te proponemos sugerencias para crear el maridaje perfecto para una sabrosa velada de verano.
Cómo almacenar el vino correctamente
Saber cómo conservar correctamente el vino es muy importante para que mantenga sus características y su sabor. De este modo, para que todo sea perfecto asegúrate de que tus botellas mantengan una temperatura y humedad perfectas con las Bodegas Hoover. Así, los vinos estarán a la temperatura ideal para acompañar las tapas.
En primer lugar, para que conozcas cuáles son las mejores tapas para acompañar el vino, las dividiremos entre tapas por el vino tinto y vino blanco.
Las mejores tapas por el vino tinto
Con el fin de disfrutar de una excelente degustación, es esencial saber seleccionar el vino adecuado y su maridaje. En el caso del vino tinto, hay que tener en cuenta su edad, ya que su intensidad varía de acuerdo con la misma. En resumen, cuanto más joven sea el vino tinto, tendrá un carácter más afrutado y menos intenso.
Sin embargo, las mejores tapas para acompañar a los vinos tintos más jóvenes suelen ser las que incluyen, por ejemplo, carne asada o guisada. Por otra parte, para las tapas con vino tinto más intenso, será una excelente opción servirlo con carnes rojas y de caza. Así como las tradicionales tapas con jamones.
Las mejores tapas por el vino blanco
Entre las tapas españolas más populares que combinan a la perfección con el vino blanco están las Banderillas, además, son bastante fáciles de hacer en casa. En cuanto a los vinos blancos ligeros, la mejor opción para las tapas es el marisco y el pescado blanco. Resultan ideales para maridar con tablas de quesos en cualquier momento. Por otro lado, para acompañar patés o quesos azules, es preferible optar por vinos blancos dulces.
Los vinos blancos más fuertes acompañan también muy bien a los mariscos y pescados o a las carnes blancas suaves, como el pollo o el pavo.
Además de estos dos tipos de vino, existen otros, como el vino rosado, que es muy versátil. No es ni blanco ni rojo, y es una gran opción para cualquier ocasión, ya sea para acompañar al pescado o a la carne.
En general, por lo tanto, los vinos tintos presentan un sabor fuerte que los hace combinar muy bien con las carnes. Por su parte, los vinos blancos se caracterizan por su suavidad, característica que les permite maridar con pescados o arroces. Sin embargo, puesto que existen vinos con olores, texturas y sabores diferentes, no podemos limitar nuestra elección de vinos solamente en función de su color.
Una vez que se han guardado las tapas sobrantes, como el queso, pueden quedar algunos olores en nuestra nevera. Sin embargo, es posible eliminar los malos olores y preservar el sabor de los alimentos con el Absorbente Universal de Olores para Frigoríficos Care+Protect.