Nuestra historia
El origen de Hoover y del primer aspirador de la historia
Una caja, un ventilador, una escoba y una funda de almohada - así es como nace el primer aspirador de la historia. La idea que transformó estos simples elementos en una de las tecnologías más revolucionarias del siglo pasado procede de James Spangler, un vigilante nocturno de New Berlin, Ohio, que sufría problemas de asma y estaba cansado de respirar el polvo que levantaba el montante en el taller en el que trabajaba. James patentó el invento y soñaba con llevarlo a todas las casas de America. Necesitaba a alguien que creyera en su proyecto y que tuviera las habilidades y los recursos llevarlo a cabo.
El origen de Hoover Decidió enviar su primera maqueta de aspirador a su prima, Susan Hoover, un paso que le llevó a su fortuna. Susan lo usó durante unos días en casa y se convirtió en una entusiasta defensora. Se lo mostró a su marido, William Hoover, dueño de una pequeña empresa que producía artículos de cuero y los vendía en su propia tienda en New Berlin. La experiencia de los años le había permitido familiarizarse bien con el mercado. Como emprendedor visionario reconoció de inmediato el enorme potencial que ofrecía este “palo” futurista. Compró la patente y comenzó la producción, estableciendo la empresa con el nombre: The Hoover Company. En 1908.
Nuestros valores
Desde el día en que se inventó el primer aspirador hasta los productos actuales, la prioridad número uno de Hoover siempre ha sido garantizar el bienestar de las personas al tiempo que ofrece electrodomésticos fiables y de alto rendimiento.
Nuestro ecosistema conectado
La conectividad para Hoover no solo significa estar actualizado. Significa proporcionar soluciones reales para mejorar las experiencias diarias a través de los electrodomésticos Hoover. Su objetivo es modernizar y mejorar la vida, la salud y el bienestar de las personas gracias a un conjunto de características únicas que ofrecen soluciones efectivas y seguras para una mejor calidad de vida.